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in Comunicación y Medios
Mirada al pasado: Estereotipos y arquetipos de género en series históricas españolas (2011-2018)
Resumen:
La creación de productos audiovisuales para televisión, que mezclan ficción e historia, han experimentado un auge en España. Por ello, esta investigación se enmarca en un análisis histórico crítico respecto a los personajes representados. A partir de estudios y teorías de representaciones de personajes desde la perspectiva de la construcción de género, esta investigación analiza los personajes de series históricas españolas emitidas entre 2011 y 2018, y su construcción a través del arquetipo, discurso de ruptura o del estereotipo, discurso generalizado. Este reconoce la predominancia de la fidelidad de los personajes históricos con las personas de la época que representa (estereotipos) y, al mismo tiempo, verifica la innovación en otros personajes (arquetipos).
1.Introducción
Esta investigación indaga en los estereotipos y arquetipos de género en personajes principales de series históricas españolas desde una perspectiva física, social y psicológica. Con la finalidad de observar cómo se crean los personajes, y cómo las construcciones de los mismos buscan y consiguen -o no- cierto rigor histórico. Independientemente de la época en la que se desarrolle una serie histórica, los personajes pueden o no responder a un mismo modelo de representación de género. A partir de estudios y teorías de representaciones de personajes, se comprueba que personajes en series históricas españolas, emitidas entre 2011 y 2018, se forman a través del arquetipo, discurso de ruptura o del estereotipo, discurso generalizado. El objeto de estudio corresponde a series históricas españolas producidas y difundidas en ámbito nacional y a través de cadenas generalistas. Se exploran y analizan los personajes principales que componen las series históricas españolas con más auge en los últimos años. Este hecho viene dado por un aumento de la producción de manera vertiginosa debido al éxito que tuvieron series internacionales como Rome (Heller et al., 2005-2007) o The Tudors (Fellner et al., 2007-2010), dando iniciativa a que productoras españolas apostaran por sus propios contenidos con el fin de cosechar el mismo éxito. La muestra está constituida por aquellas series históricas que obtuvieron mayor número de audiencia en las principales cadenas generalistas que emiten este género: Antena 3 y TVE1. Así, la hipótesis es que el género ha ido evolucionando en el tiempo y, en la actualidad, hay un especial interés por producir series históricas basadas en épocas o personajes pasados.
Este artículo versa sobre la construcción de personajes a través de estereotipos y arquetipos de género en el formato de ficción televisivo, contribuyendo al corpus teórico y metodológico de estudios previos como Caldevilla (2010 ) y su estudio sobre estereotipos femeninos en series de TV, Menéndez (2008) y su investigación sobre discursos de ficción y construcción de género en televisión, entre otros. Las series de televisión son vistas por un gran número de personas, por lo que es necesario analizar qué tipo de personajes históricos se reflejan y cómo éstos se asemejan a la época que representan.
2.Marco teórico
Distintos autores y estudios previos han demostrado la relevancia de aprovechar el medio televisivo como fuente de exposición histórica. Para ello, se establecen una serie de conceptos claves. En primer lugar, por género histórico televisivo se entiende aquel cuyo argumento se ambienta y desarrolla en una época concreta. Siguiendo a Puebla, Carrillo e Iñigo (2012), se cuentan “aquellas series en las que los personajes y tramas son completamente ficticios” o, bien, “series en las que algunos personajes y tramas son reconocibles porque han existido realmente”. Este género supone acercar a los espectadores a la historia. Las series televisivas pueden estar ambientadas en un contexto histórico cercano, como es 14 de abril. La República (Banacolocha et al., 2011 - 2019), ubicada y desarrollada en la II República española, y, también, pueden ubicarse en el siglo XVI, como Carlos, Rey Emperador (Bas et al., 2015 - 2016) o Imperium (Campos, 2012), esta última basada en el Imperio Romano del siglo II. a.c. A través de las series históricas, la audiencia puede familiarizarse, conocer y reconstruir la historia (o partes de ésta) en diferentes momentos. “La serie histórica se presenta como un discurso semejante a la historia académica, un discurso de verdad, como un discurso que pretende una versión lo más fidedigna posible de los procesos, acontecimientos o personajes del paso histórico” (Francés & Llorca, 2012, p.119). Este fenómeno ha sido investigado en España por Manuel Palacio y su obra Historia de la televisión en España (2001). En ese estudio, Palacio analiza los temas predominantes en la producción de las series, políticas y emisión, desde el nacimiento de la televisión en España hasta fines del siglo XX. Menéndez (2008), en su obra Discursos de ficción y construcción de género en televisión, propone una serie de referencias y conceptos para identificar la construcción de los roles de género en televisión. El primer elemento que considera es la transgresión del rol como “ruptura del rol tradicional, esto es, la mística de la feminidad que consagra a las mujeres únicamente como madres y esposas”. Menéndez problematiza cómo ciertos roles sociales propios de épocas históricas específicas se trasladan a la pantalla pequeña.
2.1 Concepto y acercamiento a estereotipo de género
Género se define como “la construcción sociocultural de los comportamientos, actitudes y sentimientos de hombres y mujeres” (Beltrán & Maquieira, 2001, p.159). En relación a este concepto, surgen los estereotipos de género, definidos como un conjunto de prejuicios o uniones preconcebidas que asignamos a un grupo concreto de personas. Scott (1999) considera los estereotipos dados a lo largo de la historia, como una organización social para determinar un sistema de relaciones entre la mujer y el hombre. Es decir, “se trata más bien de la significación subjetiva y colectiva que una sociedad da a lo masculino y lo femenino y cómo al hacerlo, ella confiere a las mujeres y a los hombres sus respectivas identidades” (Scott, 1999, p.6).
Walter Lippmann, en su obra La opinión pública (2003 [1922]), argumenta que el estereotipo y el prejuicio forman parte de la opinión de la sociedad por encima de los hechos que ocurren en la misma. Galán (2007) estudia la representación de las mujeres en series de ficción producidas y emitidas en las dos últimas décadas y demuestra el papel social que ocupan en la serie y la construcción de las mismas a través del análisis de conceptos claves como ocupación y relaciones sentimentales, entre otros. En un trabajo previo, Galán (2006 ) discute el proceso completo de concepción y realización de los personajes en televisión y cómo los guionistas y creadores de ellos establecen construcciones a partir de la producción noticiosa de televisión y prensa. Menéndez (2008) expone una serie de características que se dan en ambos géneros, tanto masculino como femenino en televisión, y “como su rol social” (p.59) condiciona la representación.
A partir de la construcción estereotípica de lo masculino y lo femenino, como es obvio, se establecen las normas de comportamiento, las conductas y las actitudes que la sociedad permite y promueve para uno y otro sexo, censurando la transgresión del rol (tanto para los varones como para las mujeres)” (Menéndez, 2008, p.59).
Buonanno (1999) analiza la ficción televisiva y el acercamiento de las audiencias a la relación entre la sociedad y el medio de comunicación. Con ello, ofrece un análisis desde la perspectiva de la familia o desde los héroes-mártires haciendo un análisis de su representación en el medio televisivo. Por su parte, Caldevilla (2010 ) propone una tipología de los estereotipos en la cual los personajes femeninos se agrupan en torno a conceptos clave como reina del hogar, mujer objeto, mujer profesional o feminista, entre otros. De Miguel, Ituarte, Olábarri & Siles (2004) se centran en la construcción de la identidad en las series de ficción, donde analiza la serie Cuéntame Cómo Pasó (Bernadeu, et al., 2001) y su construcción de personajes desde una visión de estructura familiar. Así, “situaciones y personajes históricos ficcionados en el cine y la televisión guían la percepción que los sujetos tienen con respecto a su comunidad y a su historia, sirviendo de vehículo al reconocimiento en el grupo, en la herencia cultural y la historia” ( Huguet, 2016 , p.23).
2.2 Concepto y acercamiento a arquetipo
Arquetipo, en tanto, se entiende como aquellos pensamientos que se comparten en una sociedad determinada, los patrones desde los cuales surgen elementos e ideas que buscan la semejanza con el mundo. El arquetipo da peso al pensamiento o a la representación individual, el estereotipo en cambio difiere en esto. El proceso de construcción de personajes en series de ficción tiene diversas características cuyo objetivo es mantener cierta verosimilitud con su universo de referencia. Sin embargo, el desafío reside en que las sociedades son cambiantes y las representaciones históricas suponen una visión que puede ser leída como extemporánea con ojos del presente. Por lo tanto, en general el estereotipo tiene connotaciones negativas. En el caso del arquetipo, por el contrario, suelen ser un modelo a imitar o admirar.
En décadas recientes, se producen series con el objetivo de atenuar unas características y crear contenidos innovadores, con mujeres valientes y/o hombres que realizan profesiones o acciones en el hogar, normalmente encasillados a la mujer. La televisión crea arquetipos, con el objetivo de desmontar la construcción de género vista en otras décadas. En relación a esto, mucho tiene que ver el pensamiento de la sociedad, el cual cada vez es más crítico y demanda mayor igualdad de género en todo ámbito de desarrollo humano, incluyendo el campo de la producción cultural. Las series de televisión se han convertido en referencia para la sociedad, se ve la necesidad de velar para que los contenidos impliquen obligaciones y deberes en la producción de contenidos audiovisuales con perspectiva de género y con valores que promuevan la dignidad y la igualdad de género. En el contexto español, es relevante la Ley 7/2010, de 31 de marzo, General de la Comunicación Audiovisual art. 4.2:
La comunicación audiovisual nunca podrá incitar al odio o a la discriminación por razón de género o cualquier circunstancia personal o social y debe ser respetuosa con la dignidad humana y los valores constitucionales, con especial atención a la erradicación de conductas favorecedoras de situaciones de desigualdad de las mujeres. ( Gobierno de España, 2010 )
Los guionistas son actores clave en la elaboración y construcción de los personajes, de las tramas y de las estrategias narrativas en la producción televisiva. En ese proceso, los contenidos informativos en televisión resultan un buen indicador de los cambios observados en la percepción de la sociedad respecto a los roles de género. Como afirma Galán, “la ficción construye socialmente la realidad a partir de unos argumentos preexistentes, adaptándolos al lenguaje audiovisual” (2007, p.59). Sin embargo, en el afán de conseguir que los espectadores se identifiquen con los personajes, el proceso de construcción de éstos suele consagrar estereotipos, lo que resulta problemático con las tendencias en sentido contrario a reconocer roles de género más complejos en un contexto de mayor demanda por igualdad entre mujeres y hombres.
3. Metodología
La investigación es de carácter cualitativo. Ya que es un género televisivo que últimamente está en auge en España, se ha acotado el número de series al análisis de la temporada de máxima audiencia. Aunque El Ministerio del Tiempo (Olivares et.al., 2015 - presente ) no obtiene la cuota más alta de pantalla en el periodo analizado, se ve necesario incluirla en el análisis debido a la representación de diferentes épocas y personajes en sus temporadas. Así, del periodo seleccionado se obtienen como resultado, 5 series; 3 pertenecientes a la cadena de TVE1 y 2 de Antena 3. Se observa que las demás cadenas generalistas no emiten series de televisión o en el caso de emitirlas, como es Telecinco, su audiencia es mínima. Es importante hacer referencia a la omisión de otros productos de entretenimiento de ficción histórica como es Amar en Tiempo revueltos (Bas et al., 2005 - 2012) o El secreto de Puente Viejo (Santamaría et al., 2011 - 2020) por incluirse dentro del formato de telenovela histórica. La diferencia entre series históricas y telenovelas históricas, es que ésta última emite de forma periódica en franja horaria mayormente de sobremesa (15:00 a 18:00 horas) y poseen gran cantidad de episodios, un ejemplo es la citada Amar en Tiempos Revueltos con 1.716. En cambio, las series históricas en las televisiones españolas emiten de forma semanal, en franja de prime time (21:00 a 00:00 horas) y poseen menos cantidad episodios, un ejemplo es Velvet (Atresmedia, 2014 – 2016) con 55. La elección del estudio de optar por series históricas, viene dada por la amplia audiencia en España que consume ese producto televisivo.
3.1Sinopsis series analizadas
Águila Roja (Nadal et al., 2009 - 2016) ambientada a finales del siglo XVII (1660 d.c), narra la historia de Gonzalo de Montalvo, un hombre que se camufla como “Águila Roja”. Un héroe enmascarado que busca los culpables de la muerte de su mujer al mismo tiempo que lucha contra la opresión impuesta por el comisario del lugar.
Cuéntame Cómo Pasó (Bernadeu, et al., 2001 – presente) narra la vida de la familia Alcántara Fernández desde 1968. La serie refleja la España contemporánea a través de una familia de clase media que viven en el ficticio barrio de San Genaro en Madrid.
El Ministerio del Tiempo (Olivares et.al., 2015 – presente) es una institución gubernamental secreta que pertenece al gobierno de España. A través de puertas ocultas, las patrullas del Ministerio viajan al pasado con el objetivo de impedir que los enemigos de la institución cambien la Historia de España.
Gran Hotel (Campos et al., 2011 - 2013) ambientada en la España de 1905, narra la historia de Julio Olmedo, un joven que decide viajar hasta Cantaloa con el objetivo de visitar a su hermana Cristina. Al llegar al Gran Hotel, se da cuenta que Cristina no está y nadie de las personas que trabajan allí saben nada. Julio, convencido de que el Gran Hotel oculta algo respecto a la desaparición de su hermana, decide infiltrarse como camarero. En el hotel, Julio conocerá a Alicia Alarcón, hija de la dueña del Gran Hotel.
Velvet (Atresmedia, 2014 – 2016) ambientada en la España de 1958, narra la historia de amor que surge en las Galerías Velvet entre Ana Rivera y Alberto Márquez. Ella, una humilde costurera y él, el futuro director y heredero de las galerías. Ambos jóvenes están dispuestos a romper con las normas impuestas por la familia de Alberto.
A continuación, se muestra el canal de emisión de las series seleccionadas y la temporada resultante para el análisis, basándose en la temporada de máxima audiencia a partir de los datos recogidos por Kantar Media. Así, el número de capítulos que se recogen a continuación es la muestra visualizada y analizada para esta investigación.
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Existe una gran diferencia de cuota de pantalla entre las diferentes series analizadas. Esto se debe a la fragmentación de la audiencia y aumento de la competencia en la programación de otras cadenas. Por ejemplo, la cuota de El Ministerio del Tiempo (Olivares et.al., 2015 – presente) es la más reducida de la tabla ya que el día de emisión de la primera temporada competía con la serie Bajo sospecha (Atresmedia, 2015 - 2016), la cual fue líder de audiencia.
Los personajes seleccionados para el análisis corresponden a aquellos roles protagonistas en la serie. Se escogen estos personajes pues, al tener mayor presencia en la serie, son al mismo tiempo más reconocibles por las audiencias, dando la oportunidad para retener más información sobre ellos y, con ello, su construcción. Así, los personajes analizados en total son 21 y se dividen de la siguiente forma:
1.Águila Roja (Nadal et al., 2009 - 2016), 6 personajes: Águila Roja, Cardenal Francisco de Mendoza y Balboa, Gonzalo de Montalvo, Hernán Mejías, Lucrecia de Guzmán y Saturno García.
2.Cuéntame Cómo Pasó (Bernadeu, et al., 2001 – presente), 4 personajes: Antonio Alcántara, Herminia López, Mercedes Fernández y Miguel Alcántara.
3.El Ministerio del Tiempo (Olivares et.al., 2015 – presente), 3 personajes: Alonso de Entrerríos, Amelia Folch y Julián Martínez
4.Gran Hotel (Campos et al., 2011 - 2013), 4 personajes: Alicia Alarcón, Diego Murquía, Julio Olmedo y Teresa Aldecoa.
5.Velvet (Atresmedia, 2014 – 2016), 4 personajes: Alberto Márquez, Ana Rivera, Emilio López y Raúl de la Riva.
Se ha diseñado una ficha de análisis para identificar si los personajes representan o no un estereotipo o un arquetipo en la Historia.
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Para la creación de la ficha, se opta como guía el libro; La imagen social de la mujer en las series de ficción y el articulo, Personajes, estereotipos y representaciones sociales de Fajardo (2007, 2006). En ellos, la autora desarrolla tres dimensiones esenciales para el análisis de personajes: “dimensión física, dimensión psicológica y dimensión social” (Galán, 2007, p.66). Estas dimensiones sirven para analizar los personajes femeninos y masculinos enfocándose en su construcción histórica.
Los resultados surgen de la ficha de análisis de contenido de personajes de series históricas realizada para esta investigación. En ella, aparecen diferentes niveles de análisis: un primer nivel identificativo de la serie. Un segundo nivel para establecer datos de contenido que consta de tres secciones definidas por Galán (2006 ): dimensión física, dimensión social y dimensión psicológica. Un tercer nivel de análisis textual para conocer los objetivos y acciones del personaje, así como un cuarto nivel para realizar una lectura histórica y observar qué colectivo definitivamente representa el personaje, al igual que su representación histórica, (enfoque desde el estereotipo o el arquetipo de género). Como menciona Pleguezuelos (2016 ), se parte de la base de que el rigor histórico en ficción es imposible, por lo que se entiende que tanto guionistas como directores se tomen licencias para que las narraciones tengan fuerza e interés en el espectador.
4.El pasado en el presente
Los resultados se basan en la representación de 10 estereotipos masculinos y 5 estereotipos femeninos. La construcción del estereotipo histórico predomina en el género masculino.
4.1.1 Dimensión física
En esta categoría se abordan aspectos del personaje como la edad y el tipo de personaje que es (real o ficción). Las edades de los personajes estereotipos femeninos son: jóvenes/adultos: 24-44 años (Lucrecia de Guzmán y Ana Rivera), adultos: 45-64 años (Mercedes Fernández y Teresa de Aldecoa) y mayores de 65 (Herminia López). Todos los personajes de estereotipos femeninos se construyen en las la ficciones televisivas.
4.1.2 Dimensión social
En esta sección se identifican aspectos como el estado civil, número de hijos, profesión o el nivel de estudios de los personajes. En primer lugar, tanto Herminia (Cuéntame Cómo Paso), Lucrecia de Guzmán (Águila Roja) y Teresa de Aldecoa (Gran Hotel) son viudas, mientras que Mercedes Fernández (Cuéntame Cómo Pasó) y Ana Rivera (Velvet) están casadas. Estos personajes representan así, diferentes uniones y desuniones sentimentales, como es el caso de Teresa Aldecoa, que por diferentes motivos su marido es asesinado al igual que sucede con Lucrecia de Guzmán. En todas ellas, a excepción de Ana Rivera, predomina el factor mujeres con hijos. Todos los personajes representan una profesión relacionada históricamente con el colectivo femenino, predominando las amas de casa o en el caso de Ana Rivera el oficio de costurera y Mercedes Fernández como comercial inmobiliaria. Mercedes Fernández, también es la encargada del hogar y de la administración económica, aspecto común en el pensamiento social del siglo XX. Lucrecia de Guzmán o Teresa de Aldecoa, debido a su estatus social, sus trabajos se ven reducidos a ser jefas, pero siempre bajo la opinión de un personaje masculino, vetando así mostrarlas como mujeres independientes.
Respecto al nivel de estudios, todas ellas tienen un nivel básico, a excepción de Mercedes Fernández que fue a la universidad y estudió la carrera de economía. Hecho que comienza a suceder en la época de los años ochenta, es decir, cuando mujeres que no pudieron ir a la universidad en su juventud por diferentes sucesos como la Guerra Civil, se plantean más tarde comenzar a estudiar. En estatus social, se observa que Lucrecia de Guzmán y Teresa Aldecoa pertenecen a la clase alta, diferenciando a Lucrecia de Guzmán, que por la época a la que pertenece su estatus se corresponde con la nobleza. Ambas pertenecen a una época donde los intereses, mayormente son el económico y de poder, mostrándose este aspecto a través de la muerte de sus familiares para conseguir los objetivos mencionados. En cambio, Mercedes Fernández y Herminia López, pertenecen a la clase media, representada a través de personajes femeninos de clase obrera española de finales de los años setenta.
4.1.3 Dimensión psicológica
Esta dimensión analiza aspectos como el tipo de personalidad, la predominancia o no de los sentimientos y el tipo de actitud (positivas o negativas). Todas se presentan extrovertidas y sus decisiones están motivadas más por los sentimientos que por la razón. Cada una aparece condicionada por su entorno, ya sea familiar o amoroso-romántico. Esto es relevante pues, independiente de la época representada, estos personajes femeninos aparecen como dependientes, por ejemplo, de su entorno familiar. Las actitudes que predominan en el caso de las mujeres de clase alta como Lucrecia de Guzmán o Teresa Aldecoa, son negativas debido al interés de mantener su estatus, además de encasillarse dentro de personajes antagonistas. En el caso de ambos personajes, se dibujan unas actitudes mezquinas debido al papel que representan, Lucrecia de Guzmán, marquesa interesada en mantener su poder dentro de la clase social a la que pertenece y Teresa de Aldecoa, dueña de un exclusivo hotel. En las clases inferiores como Mercedes, Herminia o Ana, predomina mostrar actitudes positivas como la bondad o la humildad.
4.2.1 Dimensión física
En primer lugar, se observa que la edad mayoritaria que representan los personajes masculinos, se enmarcan dentro del rango jóvenes/adultos (24-44 años). El resto se centran en la edad adulta (45-64 años), como por ejemplo Antonio Alcántara (Cuéntame Cómo Pasó) o Hernán Mejías (Águila Roja). Todos se construyen desde la ficción, sin que ninguno de ellos represente a una persona que haya existido en la realidad. Alonso de Entrerríos (El Ministerio del Tiempo), están construidos desde la alusión a otros personajes ficticios/literarios como es Alatriste, héroe del siglo XVII y soldado de la Guerra de Flandes (Guerra de los Ochenta Años) que sirve al rey Felipe IV de España.
4.2.2 Dimensión social
Partiendo del estado civil de los personajes, y número de hijos que tienen, en todos ellos hay variedad de resultados. Antonio Alcántara, casado y con cuatro hijos, se diferencia de Gonzalo de Montalvo (Águila Roja), el cual tiene un hijo y es viudo. Por otra parte, Hernán Mejías, también tiene un hijo oculto con la Marquesa, Lucrecia de Guzmán, secreto que se mantiene entre ambos debido a las diferencias de estatus social y cargos que ambos poseen. Respecto a la profesión, también existe variedad de desempeños, desde el que nos parece más cercano como puede ser el trabajo de Julián Martínez (El Ministerio del Tiempo) como enfermero en el Servicio de Asistencia Municipal de Urgencias y Rescates (SAMUR) o el director de un hotel como es Diego Murquía (Gran Hotel).
Predominan los estudios básicos, esto se debe a que la investigación da como resultado personajes históricos mayormente representados desde el siglo XVII (1660 d.c) hasta finales del siglo XX (1980 d.c), periodo donde el acceso al sistema educativo resultaba inaccesible económicamente para la mayoría de las personas. En el caso de niveles de estudios altos, se observa que Alberto Márquez (Velvet), con un nivel socioeconómico elevado, desarrolla sus capacidades intelectuales en Londres para volver a España con gran capacidad de liderazgo. Alberto encarna a los primeros jóvenes empresarios españoles en viajar al extranjero para formarse como altos cargos de empresas, especialmente familiares. En cuanto el estatus social, la mayoría de los personajes pertenecen a la clase media o en el caso de Alonso de Entrerríos (El Ministerio del Tiempo), al pueblo.
4.2.3 Dimensión psicológica
Todos los personajes masculinos de series históricas se presentan como extrovertidos. En la toma de decisiones, por un lado, se ve a los personajes que buscan sus propios intereses, como es Diego Murquía (Gran Hotel), el cual se mueve por sus sentimientos y actúa en consecuencia para conseguir sus objetivos (estar al mando del Gran Hotel). Por otro lado, un ejemplo de decisiones racionales es el de Antonio Alcántara (Cuéntame Cómo Pasó), ya que las acciones que realiza o quiere que otro personaje realice son desde lo correcto. Esto se relaciona con la actitud que toma Antonio Alcántara como cabeza de familia y persona intachable. En esta última cuestión, se observa como Mercedes Fernández (Cuéntame Cómo Pasó) intenta tomar el mando en muchas de las decisiones que no comparte con su marido. En cuanto a actitudes se diferencian dos opciones, las que poseen los personajes categorizados como “buenos”, es decir, con rasgos positivos, y los personajes “malos” de rasgos negativos. En ambas situaciones se siguen las mismas características, en el caso de los personajes estereotipados que se reflejan como positivos, encarnan características como bondad, honradez o solidaridad, como en el personaje de Miguel Alcántara (Cuéntame Cómo Pasó). En cambio, los personajes que reflejan un colectivo más antagonista, como por ejemplo Hernán Mejías (Cuéntame Cómo Pasó), encarnan actitudes como el daño, la maldad o la venganza. Por último, destaca el personaje de Águila Roja desde la perspectiva del estereotipo, representando al héroe del lugar, el cual se puede ver como la persona que ayuda a los ciudadanos de su zona o que destaca por su valentía.
5. Rompiendo moldes
La televisión busca nuevos modelos de representación de sus protagonistas, lo que incluye el intento por romper con la visión que el espectador ha tenido durante años de ciertas épocas, exigiendo contenidos innovadores con personajes que desestabilicen las características propias que corresponden por su época. Los resultados obtenidos, respecto a los arquetipos representados en series históricas españolas, indican que 6 de 21 personajes son arquetipos que representan a 4 hombres y 2 mujeres respectivamente. En el caso del género femenino, Amelia Folch (El Ministerio del Tiempo) y Alicia Alarcón (Gran Hotel). Por otro lado, en arquetipos masculinos se reconoce a Gonzalo de Montalvo, Saturno y el Cardenal Mendoza (Águila Roja) y Raúl de la Riva (Velvet).
5.1Categoría de contenido en arquetipos femeninos
Los dos personajes representados de forma arquetípica corresponden prácticamente a una misma época, Amelia Folch (El Ministerio del Tiempo) a 1880 y Alicia Alarcón (Gran Hotel) a 1905.
5.1.1 Dimensión física
Amelia Folch y Alicia Alarcón son dos jóvenes/adultas. Se corresponden, al mismo tiempo, con el tipo de personaje ficticio. Aun así, el personaje de Amelia Folch se basa en varias mujeres de finales del siglo XIX y principios del siglo XX de la historia de España. Un ejemplo es Concepción Arenal, la primera mujer española en ir a la universidad, luchadora por los derechos y la igualdad de la mujer en el desempeño de diferentes trabajos que solo estaban enfocados para hombres. Amelia Folch, también, puede encarnar a María Elena Maseras Ribera, la primera mujer en ser admitida en la universidad y, al igual que Concepción Arenal, una activista por los derechos de la mujer. Amelia continuamente está en debate con sus padres por los derechos de las mujeres en su época, pues el personaje se resiste a seguir las exigencias cómodas que le corresponden por pertenecer a una clase acomodada. Además, Amelia asiste a la Universidad de Barcelona, la misma universidad a la que fueron Concepción Arenal y María Elena Maseras en la vida real.
5.1.2 Dimensión social
Se presentan como mujeres independientes, sin hijos, centradas exclusivamente en sus intereses, aprender y estudiar. Alicia Alarcón al comienzo de la temporada muestra su entusiasmo por entrar en la universidad, en el caso de Amelia su interés por seguir en la universidad. Por tanto, son personajes que representan un nivel de estudios alto. Ambas defienden el derecho de las mujeres a ir a la misma sin que se considere inapropiado. Profesionalmente Amelia Folch trabaja para El Ministerio del Tiempo, una institución perteneciente al Estado Español. Amelia tiene dos vidas, la que desarrolla para el Ministerio en 2015 y la que lleva con sus familiares como estudiante en 1890. Alicia Alarcón no trabaja, se dedica a realizar diferentes labores en el Gran Hotel de su madre, Teresa de Aldecoa. Ambas pertenecen a la clase alta y no defienden las actitudes impuestas de la misma. Es decir, son mujeres que quieren ser luchadoras e inconformistas y no acomodarse a una serie de costumbres por pertenecer a dicha clase.
5.1.3 Dimensión psicológica
Amelia Folch y Alicia Alarcón, se construyen desde una misma línea de representación, se guían por los sentimientos para la toma de decisiones y manifiestan actitudes positivas como la bondad, humildad o la honradez. En cambio, en actitudes negativas, coinciden en la misma: son mentirosas, para no tener represalias de sus familiares por realizar acciones que van en contra de los ideales sociales como, por ejemplo, Alicia Alarcón y su relación con el camarero, Julio Olmedo (Gran Hotel).
Ambos personajes femeninos no son reducibles al estereotipo de género histórico al que pertenecen y podrían ubicarse en una época más avanzada de la que representan. De este modo, con la reconstrucción de la visión del género femenino a través de Amelia Folch y Alicia Alarcón, se constata cómo la mujer ya no actúa conforme “lo que significa ser una mujer” (Friedan, 1963, p. 26), sino que se ofrecen personajes femeninos con actitudes críticas y con poder de decisión.
5.2.1 Dimensión física
Los resultados del análisis muestran a 4 personajes masculinos arquetipos: Saturno García, Cardenal Francisco de Mendoza y Balboa, Gonzalo de Montalvo (Águila Roja) y Raúl de la Riva (Velvet). Todos ellos con una edad comprendida entre los 25 y 44 años (jóvenes/adultos), excepto el Cardenal Francisco de Mendoza, para quien su edad se comprende entre los 45 y 64 años (adulto). Todos los personajes se construyen desde la ficción y no se inspiran en personajes reales.
5.2.2 Dimensión social
Dentro de la dimensión social el único personaje viudo y que, además, tiene un hijo es Gonzalo de Montalvo. El resto de los personajes no son padres y son solteros. Por otro lado, se hace alusión a que el Cardenal Francisco de Mendoza, aunque es soltero y sin hijos como dicta la Iglesia Católica, deja claro que no dudaría en mantener relaciones sexuales con mujeres, por lo que el dato respecto a número de hijos de este personaje es desconocido. En cuanto a las profesiones que desempeñan, Saturno o El Cardenal, no responden a las características que deberían establecerse, desarrollan su trabajo de una forma poco común, es el criado de Gonzalo de Montalvo, además de ser su escudero cuando se convierte en Águila Roja.
Por otra parte, el Cardenal Mendoza, tiene el objetivo de ser el Papa de Roma y utiliza cualquier método para lograr este objetivo, incluso robar. Ambos personajes no se corresponden con las características de la época. Saturno, un criado que sirve a una persona con un estatus bajo y el Cardenal que es todo lo contrario a las exigencias de la Iglesia. Es decir, es tirano, no tiene piedad con las personas para conseguir sus objetivos y no duda en cometer cualquier tipo de actos para llegar a ser Papa de la iglesia católica. Respecto al estatus social de los personajes, Gonzalo de Montalvo y Saturno García pertenecen al pueblo, el Cardenal Francisco de Mendoza al clero y Raúl de la Riva, a la clase alta.
5.2.3 Dimensión psicológica
En la dimensión psicológica de los personajes destaca Raúl de la Riva (Velvet), un sujeto perteneciente a la época de la dictadura de Franco y que es extravagante, homosexual y reivindicativo. Actitudes impensables para la época a la que pertenece, especialmente frente al manifiesto de la homosexualidad que se instaura durante el régimen franquista y donde “cualquier desviación de esta norma (idea de masculinidad) era percibida como una “peligrosa” amenaza política a la dictadura: los homosexuales se enfrentaban así a un destino similar al de los prisioneros políticos” ( Pérez-Sánchez, 2004 , p.40). Por otro lado, sobresale el personaje Águila Roja, construido como un justiciero que recuerda a Robin Hood. Según Rodríguez-Marcos “el éxito de estos personajes depende de la capacidad del espectador para decodificarlas y asociarlas a personas reales que haya conocido o de las que haya oído hablar” (2016, p.27). La televisión crea arquetipos en torno a lo comúnmente visto por los espectadores, con el objetivo de desmontar la construcción vista en otras décadas. En relación a esto último, mucho tiene que ver el pensamiento de la sociedad, cada vez es más crítico e igualitario.
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Analizadas las series y recogidos los resultados, se comprueba cómo un 71% de los personajes principales se construyen a través de estereotipos, es decir, 15 de los 21 personajes analizados. Mientras que 6 de 21 personajes principales corresponden a arquetipos (29%). Se innova en la creación de personajes respecto a la representación del colectivo de su época, pero predomina la construcción del personaje desde el intento de la fidelidad con la historia. Por otra parte, un 67% de los personajes pertenece a la Edad Contemporánea: 1905 (Gran Hotel), 1958 (Velvet), 1980 (Cuéntame Cómo Pasó) y 2015 (El Ministerio del Tiempo). Y un 33% son los representados en la Edad Moderna: 1588 (Alonso de Entrerríos, El Ministerio del Tiempo), 1660 (Águila Roja). Todas las series de televisión analizadas en esta investigación ubican a sus personajes en edades de la historia concretos, a excepción de Alonso de Entrerríos. Alonso, después de cruzar una puerta del tiempo comienza a trabajar en el Ministerio del Tiempo y a vivir en 2015 (Edad Contemporánea) pero su personaje se construye desde el contexto histórico de un soldado perteneciente al Ejército de Flandes (Guerra de los Ochenta Años) de 1588 (Edad Moderna).
6.Conclusiones
Las series históricas llegan a un numeroso y diverso abanico de gente y, con ello, la percepción que el público puede tener de la historia. Este artículo contribuye a conocer mejor el rol de la producción de ficción televisiva, en particular en las series históricas españolas, al analizar los personajes que forman parte de este género y descubrir cómo se construyen para acercar al espectador a otras épocas y contextos.
Los resultados obtenidos afirman que predominan los estereotipos históricos de género frente a los arquetipos. Los datos analizados muestran que las imágenes siguen el rigor histórico, aunque se mezclen estereotipos y arquetipos. Se busca la fidelidad de los personajes con las personas de su época, con los roles de género y que innovan con otros personajes con el objetivo que sean atractivos para los espectadores. Esto implica la necesidad de crear y combinar diferentes construcciones de personajes, como es el caso de El Ministerio del Tiempo (Olivares et al., 2015 – presente). Por ello son importantes los estereotipos históricos para la identificación y familiarización de la audiencia con los personajes y su contexto.
Los arquetipos, en su mayoría, se relacionan con personajes con características positivas en lo que se refiere a su forma de ser o de actuar. Mientras que, en el caso de los estereotipos, se mezclan tanto personajes a los que se les da un enfoque negativo, así como positivo.
Podemos afirmar que los estereotipos se presentan como personajes más reales y próximos al espectador, mientras que los arquetipos actúan como modelo o ejemplo a imitar o admirar, como es el caso del personaje de Amelia Folch (El Ministerio del Tiempo). Todos los personajes analizados en este trabajo están construidos desde la ficción, ninguno de ellos representa a una persona de la historia. Las series históricas españolas han optado por un producto que se ambiente en una época concreta pero que ubica en ella a personajes ficticios con el propósito de añadirles características propias y moldearlos con el desarrollo de la narración. La época más frecuentemente elegida por las producciones españolas analizadas para desarrollar la narrativa de los personajes ha sido la Edad Contemporánea (67%), concretamente los años 1905, 1958, 1980 y 2015. Mientras que un número reducido de personajes se han ambientado en la Edad Moderna (33%), específicamente en los años 1588 y 1660. Comprobamos que “la oferta de series ambientadas en épocas pretéritas es variada, no sólo por pertenecer a tiempos diferentes sino también por la temática que se desarrolla en las mismas” ( Pleguezuelos, 2016 , p.321). Por último, destacar que TVE1 aparece como la cadena que más series históricas ha emitido durante la etapa seleccionada para esta investigación, entre 2011 y 2018, inclinándose por contenidos históricos ubicados en España, con los objetivos de rentabilidad comercial y competencia de programación frente a otras cadenas de televisión, especialmente a Antena 3.
Resumen:
1.Introducción
2.Marco teórico
2.1 Concepto y acercamiento a estereotipo de género
2.2 Concepto y acercamiento a arquetipo
3. Metodología
3.1Sinopsis series analizadas
4.El pasado en el presente
4.1.1 Dimensión física
4.1.2 Dimensión social
4.1.3 Dimensión psicológica
4.2.1 Dimensión física
4.2.2 Dimensión social
4.2.3 Dimensión psicológica
5. Rompiendo moldes
5.1Categoría de contenido en arquetipos femeninos
5.1.1 Dimensión física
5.1.2 Dimensión social
5.1.3 Dimensión psicológica
5.2.1 Dimensión física
5.2.2 Dimensión social
5.2.3 Dimensión psicológica
6.Conclusiones